Más pernoctaciones y viajeros mientras aumentan los alojamientos
El turismo invernal funciona, pero los empresarios apuestan por la desestacionalización
HUESCA.- La ocupación turística en la provincia, en cuanto al número de pernoctaciones y viajeros, en lo que llevamos de año, ha sido similar al 2006, aunque si se presta atención a los porcentajes, estos son menores debido al aumento de la oferta de alojamientos, más de 7.000. Unos datos que no reflejan un problema estructural, a juicio de los empresarios, sino que la ocupación está "polarizada en invierno y hay que desestacionalizarla". Estas son algunas de las conclusiones del informe que recoge el Observatorio Socioeconómico de la provincia, elaborado gracias a la colaboración de Multicaja, Ceos Cepyme, Cámara de Comercio e Industria y Fundesa.
Esta situación del turismo sería trasladable al resto de la evolución económica en los últimos meses, como recoge el Boletín trimestral de coyuntura económica, aunque a unas cotas mucho menores. La línea de actividad, según apuntó el presidente de la Cámara, Manuel Rodríguez Chesa, se mantiene y está, incluso, con datos superiores, pero "el repunte es más lento por la falta de financiación, recursos limitados e, incluso, agotados", con lo que creyó necesario un "impulso de la fluidez del crédito".
A pesar de la crisis, la oferta y demanda turística han seguido creciendo, principalmente en el número de apartamentos. Los alojamientos al aire libre y los hoteles supone el 79 por ciento de la oferta de alojamientos, según el número de plazas, en el Alto Aragón. Respecto a la restauración, entre 2008 y 2009 crecieron estos establecimientos en todas la modalidades, sobre todo en las cifras de restaurantes y cafeterías.
Más centrados en la demanda, durante este año han subido los registros de viajeros y pernoctaciones en hoteles y apartamentos, mientras que los turistas extranjeros se han interesado más por los cámpines; en los tres casos, supone una "pequeña recuperación" en el total anual. No obstante, comparado con la oferta, el grado de ocupación disminuye para todas las modalidades. Al finalizar el año, según las previsiones del Observatorio, el grado de ocupación seguirá siendo menor que en 2009, entre un 14 por ciento, en el caso de los alojamientos rurales, y un 29 en los hoteleros. El descenso será "menos significativo" que en 2009, pero seguirá siendo menor que en años anteriores.
Estos datos muestran que el turismo de invierno funciona "relativamente bien", pero hay un déficit importante en el resto de temporadas, donde el grado de ocupación está por debajo de la potencialidad de la provincia. Para Rodríguez Chesa, sigue habiendo "espíritu empresarial", pero precisa de que "entre todos seamos capaces de vender nuestro producto y quizás nos falta comercializarlo mejor". No obstante, desde el Observatorio también han comprobado una "mejora significativa puntual" en el posicionamiento de internet de algunas páginas web de referencia turística de Aragón, como el portal de Visitaragon y, con mayor peso, el de Aramón.
BOLETÍN DE COYUNTURA ECONÓMICA
Durante el tercer trimestre de 2010 se reflejaron en la provincia datos muy relacionados con el comportamiento estacional de la economía altoaragonesa y ligados al sector turístico y agrícola. A pesar del descenso del paro el pasado julio, la evolución en agosto y septiembre no fue favorable por el incremento de desempleados en el sector agrícola, sector servicios y construcción. En los dos primeros casos y en el colectivo sin empleo anterior, mantienen el mayor incremento interanual de paro. Este aumento refleja las dificultades "para incorporar a los jóvenes al mercado laboral", señaló Jorge Gómez, subdirector de Fundesa.
El lado positivo lo ofrece la evolución del comercio exterior altoaragonés, con datos "muy superiores" a la media aragonesa y nacional. No obstante, los movimientos tienen cierta concentración en un número reducido de empresas en sectores como el metal o químico, mientras existe algo más de reparto y equilibrio entre pymes. Aparte, sobresale el descenso de los impagos de las empresas, muy por debajo de la media aragonesa y nacional, salvo en julio, donde la morosidad repuntó de forma coyuntural hasta el 4,13 por ciento.
Fuente: Diario del AltoAragón